Informe de Milenio sobre la economía de Bolivia. Junio de 2024 No 46

La economía boliviana continúa en una pendiente de caída y se agudizan los desequilibrios fiscales, monetarios, cambiarios y financieros, que conllevan riesgos para la estabilidad macroeconómica. La falta de soluciones oportunas agrava los problemas y crea incertidumbre sobre el rumbo actual.
El desempeño económico choca con la inestabilidad política e institucional que se apodera del país. La percepción de crisis tiende a extenderse; se resiente la confianza de las empresas y otros actores económicos. Los desafíos económicos son tan cruciales como los retos de gobernabilidad. El dilema es cómo avanzar hacia un horizonte constructivo y de consensos básicos sobre la reforma económica, el fortalecimiento de las instituciones democráticas, la vigencia del Estado de derecho.
Bolivia requiere nuevas políticas que eviten que la crisis se profundice. Una nueva estrategia económica para sanear las cuentas públicas y para encauzar cambios estructurales que puedan impulsar un proceso de crecimiento con más inversión, exportaciones, productividad, innovación y capital humano.
Este informe se inscribe en ese crucial desafío.